Durante siete años, Apple ha sido el rey indiscutible de la tecnología portátil: su Watch es el reloj inteligente más vendido del mundo. Entonces, ¿puede el esperado Pixel Watch de Google, que se lanzó el 13 de octubre, aspirar a competir?
Hemos hecho bastantes desmontajes de smartwatches, pero vamos a ser sinceros, casi todos han sido Apple Watches. Así que nos entusiasmó la posibilidad de analizar un reloj de la competencia. Aunque es difícil juzgar la tecnología de primera generación frente a la línea de Apple Watch, que ya tiene una década de antigüedad, no estamos seguros de que Pixel esté todavía a la altura.
Dicho esto, es lo suficientemente prometedor como para que, si Google sigue adelante con él, y toma algunas notas de reparabilidad, en un par de generaciones el reloj Pixel pueda aún encabezar nuestra lista de smartwatches.
Lo feo
Sabemos que no deberíamos juzgar un reloj por la caja. Pero con una corona de aspecto barato, y una pantalla que se anuncia con una durabilidad cuestionable, da una primera impresión muy mala. Esperemos que esa pantalla sea fácilmente reemplazable al menos.
Sacar la caja superior envolvente es sorprendentemente fácil a pesar de que la corona sobresale por debajo de ella. Una vez dentro, este reloj tiene un aspecto muy poco pulido de Android. La funda de la batería es bastante estándar, pero con un montón de cinta Kapton amarilla metida aquí, es como las fotos de bebés incómodos de la vida real, aww, así que gen uno. Es cierto que hemos estado haciendo un montón de desmontajes de Apple últimamente, por lo que es un acto difícil de seguir, pero cosas como la cinta Kapton es a menudo un signo de soluciones rápidas. Al menos no hay cinta de cobre aquí… ¡aun!
Lo malo
El diseño interno deja algo que desear, y ese algo es la accesibilidad. Con un camino laberíntico hacia la pantalla y la batería, nos encontramos con unos cuantos callejones sin salida antes de conseguirlo. Nota al margen: los manuales de reparación facilitarían mucho esta parte.
Es cierto que los diseñadores de smartwatches tienen que hacer una serie de concesiones y compromisos, pero ni la pantalla ni la batería -los dos componentes más sustituidos- son fácilmente accesibles. Soportes, contactos diminutos, tornillos Torx T2 diminutos y capas de piezas terciarias nos separan de estas reparaciones. El conector de la pantalla está debajo de la batería, lo que requiere un poco de palanca para acceder a ella, lo que no es nuestro favorito, ya que una batería forzada es una batería potencialmente dañada. Y la batería requiere un poco de contorsión y un montón de eliminación de componentes para acceder.
Y como último clavo en el ataúd, todas las entradas mecánicas -la corona y el botón lateral- están en el mismo cable que un puerto de prueba que parece estar permanentemente unido a la carcasa. Eso significa que no se pueden sustituir los interruptores atascados, al menos sin daños colaterales.
Lo bueno
Aun con todos los problemas que el Pixel Watch tiene que resolver, ha abordado desde el principio una característica de reparación que Apple tardó nueve años en conseguir: una parte trasera extraíble.
El Apple Watch de primera generación era un desastre, el sistema en paquete era una maraña de cables a lo Cthulu, y su conjunto de sensores estaba obstinadamente encajado en la caja y el cristal de lectura. El Pixel sigue el ejemplo del Apple Watch Ultra, permitiendo el acceso por la parte trasera. Puede que el Pixel no tenga tornillos -nuestro cierre favorito habitual- pero se las arregla para tener algo casi tan genial.
El cristal trasero parece estar sujeto por una especie de junta líquida que sella herméticamente, pero se abre limpiamente. Además, se despega del cristal sin apenas dejar residuos. Si pudiéramos conseguir algún adhesivo de repuesto, sería fantástico. Hay muchos otros aparatos en los que nos gustaría ver este pegamento. Normalmente odiamos el pegamento, pero no es el pegamento en sí lo que odiamos. Es cuando el pegamento impide, o complica la reparación, por ejemplo, los sellos súper fuertes, o la tediosa limpieza y reaplicación. Ya hemos aceptado en nuestro corazón el adhesivo de liberación elástica , y hay espacio más que suficiente para más pegamento para reparaciones en nuestras vidas.
En general, el Pixel Watch no es un mal dispositivo. Sufre de una primera aparición incómoda, tal vez agravada por un largo proceso de producción, pero es un buen comienzo. Con una base como esta, es posible que tengamos un competidor del Apple Watch al que apoyar. Sólo tienen que resolver algunos puntos de reparación por el camino.
Este artículo fue traducido por Mariana Roca
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