El iPhone 14 continúa el bloqueo de las reparaciones digitales de Apple
Actualidades tecnológicas

El iPhone 14 continúa el bloqueo de las reparaciones digitales de Apple

Here are all the parts you can and can't swap out.

Desde el iPhone XS, Apple ha emprendido la práctica de instalar bloqueos de software en cada uno de sus teléfonos para, según dice, evitar que los usuarios intenten reparaciones “no autorizadas”. Así, cada vez que usas tu iPhone, el dispositivo lee el número de serie único de cada componente interno para determinar si ese componente tiene permiso oficial para estar dentro de tu teléfono o no. Si no lo está, las consecuencias varían: puedes recibir una notificación, ver anuladas ciertas funcionalidades o que algo funcione inicialmente sólo para que se rompa tras una actualización. Por su diseño, nadie puede eliminar estos bloqueos de software, salvo Apple y sus representantes autorizados.

El proceso de toma de huellas dactilares de cada componente se llama “serialización” y permite emparejar un componente serializado con un dispositivo, lo que llamamos “emparejamiento de piezas”. Apple ha continuado con la desalentadora tendencia de serializar un número cada vez mayor de piezas en sus dispositivos. Naturalmente, teníamos curiosidad por ver si el iPhone 14, que ha mejorado tanto en otras partes del proceso de reparación, se ha visto restringido por el programa de emparejamiento de piezas en constante expansión de Apple.

iPhone 14 battery error message
El intercambio de componentes entre el mismo modelo genera una advertencia de “piezas originales” y puede desactivar ciertas funciones.

Y sí, como empresa que vende piezas, tenemos un caballo en esta carrera, pero también lo tienen todos los que tienen un aparato. Cuando tu aparato se rompe, deberías poder arreglarlo o llevarlo a un taller de tu elección. El emparejamiento de piezas amenaza esa opción, al hacer que la reparación independiente y por cuenta propia sea imposible o excesivamente cara. Junto con el apoyo de la comunidad de reparadores, hemos dado la voz de alarma sobre el emparejamiento de piezas, que muchos ven como un intento de monopolizar la reparación a expensas de los clientes y los negocios de reparación independientes. 

Pero espera, dirás. ¿No tiene Apple un programa de Proveedores de Reparación Independientes? ¿No acaban de lanzar un programa de autoservicio de reparaciones? ¿No venden ahora las piezas directamente a los consumidores? Tienes razón. Lo tienen, lo hicieron y lo están haciendo. Cuando estos programas se lanzaron por primera vez, estábamos eufóricos; teníamos grandes esperanzas tanto para Apple como para el resto de la industria electrónica. Sin embargo, han quedado por debajo de nuestras expectativas, y todo tiene que ver con el emparejamiento de piezas.

A stack of pelican cases full of Apple tools with an iFixit toolkit leaning against it

Los talleres independientes que se acogen al programa de Apple no pueden hacer lo que han estado haciendo desde que comenzaron las reparaciones de teléfonos móviles: coger piezas de teléfonos viejos, guardarlas y ponerlas en los nuevos. En su lugar, para mantener todas las funciones que esperan sus clientes y no introducir ninguna advertencia aterradora, tienen que comprar las piezas directamente a Apple, pagando el precio completo de la pieza nueva (si el cliente entrega su pieza vieja, el taller puede obtener una pequeña rebaja por enviarla). A continuación, tienen que emparejar la nueva pieza con el número de serie del dispositivo mediante un software especial.

El autoservicio de reparación puso al descubierto esa realidad para todos. No puedes comprar una pila de baterías de iPhone certificadas por Apple para llevar a la fiesta de Navidad y esperar poder ponerlas en los teléfonos de tu familia, a menos que les pidas a todos sus números de serie por adelantado.

Por eso estamos vigilando muy de cerca qué piezas, en concreto, se pueden y no se pueden intercambiar entre modelos de iPhone. Es la mejor estrategia de Apple para mantener las reparaciones bajo su propia llave, y seguimos encontrando más piezas que no se pueden intercambiar.

Así que, recientemente, hemos probado a intercambiar componentes entre dos iPhone 14 de modelo base y dos iPhone 14 Pros para ver si Apple ha ideado algún nuevo inconveniente de emparejamiento de piezas para nosotros.

Una vez más, la mayoría de los componentes del iPhone tienen un identificador único. Así, por ejemplo, dos cámaras frontales del iPhone 14 serán idénticas en todos los sentidos, excepto en su huella digital. El Sistema en Chip (SoC), que es el cerebro del dispositivo, almacena ese identificador único en una parte bloqueada y encriptada de su memoria a la que sólo puede acceder el software de servicio de Apple. De este modo, el sistema sabe si cambias la cámara frontal porque la huella digital cambia. Así que ahora tienes que “emparejar” la nueva huella digital con el SoC de tu placa lógica, y por eso el último paso del programa de reparación de autoservicio requiere que llames para “iniciar la configuración del sistema”. 

La configuración del sistema es un eufemismo para referirse a una pieza de software de Apple que pasa un conjunto de claves de descifrado al SoC para permitir la sobrescritura de la huella digital almacenada del componente.

El método de nuestro experimento consiste principalmente en pruebas de ensayo y error. Para probar si la cámara frontal de un teléfono donante será aceptada por el teléfono receptor, es necesario intercambiar físicamente estas piezas. Tenemos que hacer esto con cada uno de los componentes.

Antes de intentar nuestro experimento de emparejamiento de piezas, esperamos varias semanas para asegurarnos de que Apple tuviera tiempo de solucionar cualquier problema de software con los nuevos dispositivos. Esta prueba se realizó con iOS 16.0.3, que hasta ahora ha incluido dos rondas de correcciones de errores desde el lanzamiento de la línea de teléfonos iPhone 14.

También cabe destacar que los dispositivos iPhone 14 y 14 Pro son estructuralmente muy diferentes. Aunque son similares en tamaño y apariencia, el interior del Vanilla iPhone 14 ha sido completamente rediseñado. Los teléfonos también utilizan placas lógicas diferentes, ya que el modelo básico del 14 utiliza la última generación de SoC A15 y los modelos Pro llevan el último SoC A16 de Apple.

Decidimos no penalizar la compatibilidad de los teléfonos entre sí, dado que a todos los efectos son diseños completamente diferentes. Teniendo esto en cuenta, todas las pruebas de intercambio de piezas siguientes se realizaron entre dispositivos del mismo modelo, es decir, una cámara del iPhone 14 Pro colocada dentro de otro iPhone 14 Pro.

Pantalla

En su mayor parte funcional: Las pantallas son intercambiables pero con True Tone y Auto Brightness deshabilitados y aparece un aviso de “piezas originales”.

Batería

En su mayor parte funcional: Las baterías son intercambiables, pero la salud y las estadísticas de la batería se han desactivado y una advertencia de “piezas originales” está presente.

Cristal trasero + Bobina de carga inalámbrica

Funcional: Hasta el momento no se han reportado efectos adversos.

NFC (sin evaluar)

Cámaras frontales

No es funcional: FaceID ya no es funcional y la cámara selfie no está operativa.

Cámaras principales

Mayormente funcional: Este componente sigue funcionando como está previsto, pero con un aviso de “piezas originales” que aparece en pantalla en cada arranque.

Altavoces

Funcional: Hasta el momento no se han reportado efectos adversos.

Taptic Engine

Funcional: Hasta el momento no se han reportado efectos adversos.

Placa lógica

Parcialmente funcional: La placa lógica aloja el SoC por lo que, como es de esperar, ninguno de los componentes informará de un número de serie reconocido y entrarán en juego todos los problemas anteriores.

Así que ahí lo tienen. Aunque no podemos informar de ninguna mejora en relación con el emparejamiento de piezas, nos alivia que no parezca que se hayan aplicado nuevas restricciones.

En definitiva, el cristal trasero extraíble del iPhone 14 y del iPhone 14 Plus aumenta en uno el número de componentes reemplazables. A primera vista, puede parecer un cambio pequeño, sobre todo porque los modelos Pro conservan el mismo cristal trasero pegado de las generaciones anteriores. Sin embargo, es significativo dado el enorme rediseño interno que ha sido necesario para conseguirlo.

Hay que reconocerlo: es un paso en la dirección correcta. El diseño modular facilita unas reparaciones más rápidas, baratas y rentables, ya sea en un centro de servicio Apple cercano o en cualquier otro lugar.

En cuanto al emparejamiento de piezas, bueno, hay muchas razones por las que deberías preocuparte por tu capacidad de intercambiar libremente componentes en tu dispositivo sin tener que soportar una pantalla que no ajuste automáticamente el brillo (o cualquier otra barrera artificial a la funcionalidad, para el caso). 

Aquí hay uno que me llama la atención.

Steve Jobs no quería que la gente pudiera entrar en sus dispositivos diciendo que sólo “estropearían las cosas”. Cuando se ve desde este punto de vista, es fácil ver cómo Apple podría justificar la serialización y las restricciones a la reparación. Todo se hace con el fin de traernos, a las masas ignorantes e incompetentes, el smartphone perfecto.

Por supuesto, esta actitud ignora el hecho de que los talleres independientes contratan a la misma mano de obra que las tiendas de Apple y tienen una experiencia y calidad de reparación equivalentes (como concluyó una investigación de dos años de la Comisión Federal de Comercio). Ignora el hecho de que millones de personas normales de todo el mundo han reparado sus propios productos Apple utilizando las guías de iFixit, normalmente sin más problemas que los introducidos por el emparejamiento de piezas. No hace falta tener el logotipo de Apple en la camisa para sustituir la pantalla de un iPhone o cambiar la batería de un MacBook, devolviendo el dispositivo a ese estado de perfección brillante recién salido de fábrica. 

Pero algunos de nosotros no buscamos la perfección; de hecho, la encontramos asfixiante. Lo que queremos es modificar un aparato para darle carácter o incluso crear arte a partir de lo que antes era un objeto fabricado en serie sin ningún rasgo distintivo que lo separe de todos los demás que salen de la misma cadena de montaje. Del mismo modo, reparar un aparato le da profundidad y carácter; le da al objeto una historia propia. La reparación es la antítesis del conformismo y puede convertirse en la máxima expresión de la individualidad, una actitud que está en el centro del arte japonés del kintsugi y de su primo moderno, la reparación visible.

Tanto si se hace para restaurar la pulida perfección de fábrica de un aparato como para enfatizar la historia del reparador, la reparación debería estar al alcance de todos. El emparejamiento de piezas amenaza esa realidad, y seguiremos buscándola, intercambiando una pieza cada vez.

Este artículo fue traducido por Mariana Roca