La reparación puede ser un ámbito más bien masculino: las mujeres sólo representan el 7% de los técnicos de reparación de ordenadores, y sólo el 2% de los técnicos de reparación de coches. Muchos de nuestros héroes de la reparación son también hombres, desde Bob el Constructor hasta nuestros padres y abuelos. Las suposiciones culturales hacen que muchas mujeres sean reacias a tomar un destornillador, como han comentado nuestras compañeras Cait y Brittany.
Pero conocemos a muchas mujeres aficionadas a las reparaciones, algunas de las cuales hemos presentado antes: la madre que suelda microchips (Jessa Jones-Burdett, de iPad Rehab), la abuela reparadora (Jodi Spangler, de Lakeshore Mac) y las mujeres que están detrás del servicio de reparación nómada Pop-Up Repair (Sandra Goldmark, fundadora, y trabajadoras como Flora Vassar).
Hoy destacamos a otras mujeres expertas en reparaciones para demostrar que las chicas también pueden reparar cosas.
49.000 reparaciones al año en una empresa saudí
(Maryam Al-Subaie, Saudi Arabia)
En Riad, un equipo insólito dirige un taller de electrónica de gran éxito: dirigido por la licenciada en arte Maryam Al-Subaie, un grupo de mujeres saudíes ha arreglado 49.000 aparatos en el último año. Estas verdaderas emprendedoras encontraron un hueco en el mercado local y lo llenaron. “Muchas mujeres que quieren reparar sus teléfonos móviles y ordenadores portátiles temen llevarlos a talleres de reparación dirigidos por hombres”, dijo Maryam a la Gaceta Saudí, “porque no quieren exponer a extraños los documentos privados y las fotos de los miembros de la familia guardados en los dispositivos”. Su cualificado equipo de técnicas e ingenieras de electricidad era la respuesta perfecta a este problema: reparación por mujeres, para mujeres.
El misterio de la mecánica
(Leah Bolden y Karen DeVenaro, SeeJaneDrill.com)
¿Puedes ajustar la separación de una bujía? ¿Laminar una encimera? ¿Instalar una toma de corriente? Leah y Karen, de SeeJaneDrill.com, quieren enseñarte cómo hacerlo, con vídeos y guías de reparación paso a paso que parten de lo más básico. Leah fue yesera oficial durante 20 años, y Karen trabaja como directora de aprendizaje de electricidad. Se unieron para hacer que las habilidades de reparación del hogar fueran accesibles para los principiantes. En un principio, pensaban dirigirse a las mujeres, pero descubrieron que muchos hombres también aprecian el estilo de enseñanza de Leah, “la vecina manitas “. Las reparaciones domésticas, dice Leah, no suelen ser tan difíciles como la gente se imagina: “La verdad es que estas reparaciones son muy fáciles; sólo necesitas que alguien te enseñe lo que hay que hacer”. Y puede ahorrarte mucho dinero. Un espectador dice que un fontanero le presupuestó 2.700 dólares para sustituir dos válvulas de cierre de agua en su casa. Después de ver un vídeo de SeeJaneDrill, sustituyó las válvulas él mismo por unos 20 dólares en piezas.
Atrévete a reparar
(Stephanie Glakas-Tenet y Julie Sussman, DaretoRepair.com)
Si eres una reparadora nata, como la escaladora de chimeneas Stephanie, o si te has convertido en reparadora más tarde, como Julie, ellas tienen un libro de reparaciones para ti. Atrévete a reparar: Una guía para arreglar (casi) todo en casa y sus tres secuelas temáticas son bestsellers nacionales dirigidos a mujeres que quieren aprender a ser más hábiles. “Mi prueba de fuego fue mi madre”, dice Julie. “Si pensaba que mi madre podía hacerlo, entonces sabía que lo habíamos logrado”. Cuando su madre, que acaba de enviudar, arregló ella sola sus tuberías congeladas, con la ayuda de Atrévete a reparar, Julie supo que había hecho el trabajo que se había propuesto.
Rosie la Reiniciadora
(Skillsharers con el Proyecto Restart)
Las mujeres de los talleres de The Restart Project arreglan iPhones como “ejercicio de calentamiento”. The Restart Project es un grupo con sede en Londres cuyo objetivo es minimizar los residuos electrónicos enseñando a la gente a reparar y mantener sus aparatos, cofundado por una mujer increíble llamada Janet Gunter. Nuestros amigos hacen muchas cosas interesantes (como fiestas de reparación en todo el mundo y grandes charlas TEDx). Pero desde 2014, han estado organizando regularmente talleres de reparación para mujeres.
Compartir la reparación
(Nancy Lo, Hennepin County Fix-It Clinic; Cindy Correll, Repair PDX; y muchos otros)
Después de oír hablar de fiestas y cafés de reparación, Nancy Lo decidió que quería llevar el espíritu de la reparación al condado de Hennepin. Trabaja en la reducción y el reciclaje de residuos en el Departamento de Medio Ambiente y Energía del condado de Hennepin, y una vez desvió personalmente 9.7 toneladas de cartón. En septiembre de 2012, Nancy empezó a organizar clínicas mensuales de reparación, en las que la gente aprende a arreglar sus propias cosas con la ayuda de voluntarios, y hasta la fecha han desviado 8203 kilos de cosas arregladas del flujo de residuos. Cindy Correll tiene una misión similar en los cafés de reparación que organiza en Portland, llamados Repair PDX. Ha declarado a Star News: “Hemos descubierto que mucha gente tiene una conexión emocional con sus cosas. No quieren tirar las cosas, pero no saben cómo arreglarlas. La habilidad de reparar no va a desaparecer”. Los cafés de reparación y las clínicas de reparación son algunas de las mejores maneras de mantener vivo el espíritu de la reparación.
¿Conoces a alguna otra mujer que sepa reparar? Háblanos de ellas en los comentarios.
Imagen de cabecera de Heather Agyepong, cortesía de the Restart Project
Este artículo fue originalmente escrito por Elizabeth Chamberlain y traducido por Mariana Roca.
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